Me encantó nuestra escapada romántica en este hotel. Lo que más me gustó fue el trato amable del personal, siempre dispuestos a ayudar y a explicarnos todo sobre la zona. Además, las instalaciones estaban muy limpias y bien cuidadas, lo que hizo que nos sintiéramos muy cómodos durante toda nuestra estancia. También la ubicación del hotel fue perfecta, ya que se encontraba cerca de varios puntos de interés que queríamos visitar. Sin duda, recomendaría este lugar a cualquier pareja que esté buscando un lugar acogedor y agradable para pasar unos días juntos.

En cuanto a las cosas que no me gustaron tanto, una de ellas fue la falta de ventilación en la habitación. No había ventanas y esto hizo que la habitación se sintiera un poco claustrofóbica.

La ubicación del albergue es perfecta, cerca de los lugares importantes de la ciudad, como lo mencionaron algunos huéspedes en sus comentarios. También, las instalaciones son impecables y nuevas, especialmente los baños y las duchas, los cuales recibieron elogios por su comodidad y limpieza. Además, el desayuno es delicioso, con pan gallego y zumo de naranjas recién exprimido, como mencionó un huésped en su reseña.

La variedad de opciones en la cafetería es limitada.

El albergue está muy limpio y los baños son amplios y cuidados. El personal es atento y explica todo lo necesario para conocer Padrón. Hay una zona común con mesas, platos, microondas y nevera para prepararse algo.

Me sentí muy bien, no tengo ninguna queja en absoluto.

Las habitaciones eran amplias y limpias, con baño privado. El personal fue amable y nos dio información detallada sobre qué hacer en la zona. La ubicación del hotel era estratégica, con fácil acceso a lugares de interés turístico. Disfruté de un desayuno delicioso con pan gallego y zumo de naranjas recién exprimido.

Había demasiadas camas en las habitaciones compartidas, lo que causaba ruido y desorden. La ventilación en las habitaciones era insuficiente, ya que solo se podía abrir una puerta para ventilar.

Me encantó la ubicación de este lugar, ya que estaba muy cerca de varios puntos de interés turístico. Además, las habitaciones eran bastante cómodas y espaciosas, lo cual fue genial para nuestra escapada romántica. Otra cosa que realmente apreciamos fue el servicio amable y servicial del personal, quienes nos brindaron recomendaciones útiles sobre dónde comer y qué visitar en los alrededores.

Hubo algunos aspectos negativos durante nuestra estadía. La iluminación en los baños de las chicas era deficiente y varios sensores no funcionaban correctamente, lo que hizo que experimentara un momento incómodo en la ducha.

Me encantó hospedarme en este lugar durante mi viaje de negocios. Lo que más me gustó fue la limpieza impecable de las instalaciones y la amabilidad del personal. Además, me gustó mucho contar con una cafetería en el establecimiento, donde pude disfrutar de unas deliciosas tapas y un reconfortante caldo gallego. Por otro lado, la ubicación del hotel era excelente, ya que estaba a solo unos minutos del centro de la ciudad y de los lugares de interés.

Hubo muy pocas cosas que no me gustaron de mi estancia en este lugar. Tal vez, lo único para mencionar es que algunas habitaciones no contaban con ventanas, pero eso no fue un gran inconveniente.

Personal amigable y cercano

Atención al detalle. Comida deliciosa.- Relación calidad-precio excelente

No se me ocurre nada.

Habitación cómoda y limpia. Excelente atención de Manolo y Belén.- Buena ubicación cerca del centro.- Detalles amables como explicaciones y regalos.

Nada que no me haya gustado.

Mi estancia en O Albergue Da Meiga fue simplemente maravillosa. Desde el momento en que llegué, me sentí bienvenido y como en casa. La habitación privada en la que me alojé era espaciosa y cómoda, con camas y almohadas de gran calidad. Además, el baño compartido estaba siempre en perfectas condiciones, siempre limpio y espacioso. Me encantó que el albergue tuviera un área común amplia con cocina, lo cual me permitió preparar mis propias comidas cuando lo deseé. La ubicación del albergue también era excelente, ya que estaba cerca del centro y justo al lado del Camino de Santiago.

La mujer que me atendió fue muy amable en todo momento. Súper limpio, amplios lavabos, dormí en habitación individual con el baño compartido. Tiene una zona común con mesas con platos, microondas y nevera por si quieres prepararte algo. Todo estaba muy nuevo y limpio. Manolo, quien nos atendió, se esmeró muchísimo para que aprovecháramos nuestro día al máximo, explicándonos muchas cosas que sin su ayuda nos hubiéramos perdido. Y pude ver que hizo lo mismo con el resto de personas que llegaron, ¡muchas gracias! En este albergue destaca la amabilidad y la calidez de sus dueños, que se esmeran en hacerte sentir como en casa. La habitación privada es amplia y cómoda. Las camas y almohadas confortables. Todo actual y cuidado hasta el último detalle. El baño compartido es muy espacioso y limpio. Tienen un área común amplia con cocina y otras facilidades. Está ubicado muy cerca del centro y al lado del Camino de Santiago.

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El personal del hotel fue extremadamente amable y atento durante toda mi estancia. Me recibieron calurosamente y me mostraron todas las instalaciones del alojamiento. Además, me proporcionaron sábanas de tela sin ningún problema cuando se las pedí. La chica de la cocina durante el desayuno fue encantadora y tuvimos una agradable conversación. Sin duda, me volvería a hospedar en este lugar, ya que el trato del personal es inmejorable y se nota que se preocupan por cada detalle.

La única pega que puedo mencionar es que pasé calor durante la noche. Sin embargo, entiendo que esto no es algo que dependa del alojamiento en sí.

El albergue está bien cuidado y limpio en todos los aspectos. Las habitaciones cuentan con sábanas y nórdicos para mayor comodidad. El personal es amable y brinda información sobre qué ver en la zona. se destaca la comida casera y el buen desayuno ofrecido.

La falta de iluminación en los baños de chicas puede causar problemas durante la ducha.

Me gustó mucho la amabilidad del personal y cómo nos explicaron los lugares importantes de la zona. También me encantaron las instalaciones limpias y bien decoradas. Además, el desayuno estaba delicioso, con pan gallego y zumo de naranja recién exprimido.

No me gustó que las camas no tuvieran cortinas, lo que hacía que no tuviera mucha privacidad. También estaba bastante alejado del centro y del inicio del Camino.

El albergue en el que nos hospedamos durante nuestra estancia fue una elección acertada. La ubicación es excelente, muy cerca del centro y al lado del Camino de Santiago, lo que nos hizo más fácil explorar la zona. Además, las instalaciones están nuevas y muy limpias, lo que nos dio una sensación de comodidad y bienestar. La habitación era espaciosa y las camas y almohadas eran muy cómodas.

En cuanto a los aspectos negativos, echamos en falta una ventana y un perchero para colgar la ropa en nuestra habitación. Sin embargo, este pequeño detalle no afectó en gran medida nuestra experiencia en el albergue.

Espectacular albergue, nuevo y limpio. Trato humano y acogedor de Manolo y Belén.Ubicación ideal cerca del centro.Desayuno delicioso con pan gallego y zumo fresco.

Todo estupendo.